Diane - La Historia de la Guitarra
Me gustó mucho esa guitarra de 12 cuerdas que me sirvió mucho por varios años. No soy músico profesional, pero aprecio bastante la música y la guitarra me ayudó a que eso ocurriera. La toqué muy seguido, normalmente entre amigos y con grupos pequeños. La acostumbraba a usar para cantar himnos y para alabar al Señor. Llegó el día, sin embargo, cuando mi esposo Lynn y yo estábamos desempacando el carro, después de una junta. Descargamos el carro y esta fué la última vez que vimos la guitarra. Más tarde, cuando fuimos a recoger la guitarra ya había desaparecido. Buscamos cuidadosamente, doblemente revisamos el carro, detrás de los asientos y en todos los lugares posibles, más no pudimos encontrarla. Desapareció.
Esperamos durante un par de semanas que de alguna manera apareciera. Pues bien, amamos a Dios y Él siempre ha escuchado nuestras plegarias muchas veces; por lo mismo, naturalmente oramos para que Ėl nos ayudara a recuperarla. Una linda guitarra acústica es un poco cara y una de 12 cuerdas aún más. Mientras le pedíamos a Dios y esperábamos su respuesta, decidimos ir de casa en casa de empeño, a tiendas de mercancía de segundo uso y a tiendas de música para ver si posiblemente apareciera en una de ellas. Mas nunca apareció.
Después de un par de meses nos rendimos de andar buscando la guitarra; no obstante, seguimos orando y decidimos justamente comprar una nueva. Establecimos un precio mayor de $500.00. Era mucho dinero, pero nosotros sentíamos que valía la pena.
A través de los años, hemos hecho amistad con unos pocos músicos profesionales y estamos en especial acercamiento con Barry McGuire y con su esposa. Mas ahora, por este tiempo, sucedió que cuando estábamos listos para comprarla Barry estuvo en la ciudad para un concierto. Así que planeamos decirle lo que pasó y pedirle que se uniera a ir a las tiendas de música y que nos ayudara a escoger un buen instrumento con los $500.00 que habíamos apartado. Cuando él llegó de Fresno, California, no sabía que me hacía falta mi guitarra.
Sin embargo, cuando Barry llegó y le pedimos ayuda, nos sorprendió diciéndonos que había visto reciéntemente a Laurie, una vieja amistad de él. Y ella acababa de pedirle a Barry si pudiera ver si alguien en el área de Los Angeles comprara su vieja guitarra. Esto no es lo que Barry usualmente acostumbraba a hacer pero lo hizo en són de amistad, sin saber quién posiblemente la quisiera y él la puso detrás de su carro. La guitarra había sido obsequiada a Laurie por un cercano amigo hacía varios años y realmente era una cara Yamaha, hecha por encargo especial, construída como guitarra marca “Martin”, de alta calidad, con 12 cuerdas, y no algo que se compra sacada de los estantes. Oh, y tenía un buen sonido como era de esperar de una guitarra hecha por encargo especial.
Ahora Laurie, sabiendo que era una valiosa guitarra, para no desear pasar por la inconveniencia y angustia de venderla, había dicho específicamente que se sentiría feliz si Barry pudiera venderla en $ 500.00, incluyendo su estuche. En ese entonces ni Laurie ni Barry sabían que yo necesitara una guitarra nueva. Es así como se dieron los hechos y exáctamente al precio que podíamos pagar.
¡Así pues, compramos la guitarra de Laurie!
He aquí el modo de pensar acerca de lo anteriormente ocurrido: Dios fué tan amable al acercarnos a Jesús, su hijo, un buen número de años atrás, que nos encantara cantar y alabar su nombre. Nuestra guitarra fué parte de cómo hacíamos esto. Cuando desapareció la guitarra y pedíamos que se nos regresara, pareciera que Dios quería decirnos: “Estoy satisfecho de que estén contentos con su antigua guitarra, pero yo quiero que Uds. tengan una mucho mejor, porque los AMO. ¡Disfrútenla!”
Esto fué como Dios contestó nuestra oración.
Diane
¿Le gustaría hacer que Jesús sea el Señor de su vida?
- Jesús, Yo creo que eres el Hijo de Dios. Te agradezco por haber muerto en la cruz por mis pecados y haber resucitado. Por favor, perdona mis pecados y concédeme el regalo de la Vida Eterna. Te pido entres en mi corazón y en mi vida como mi Señor y mi Salvador. Por favor ayúdame a crecer en ti ya vivir para ti. Gracias por haber entrado en mi corazón.
Si este mensaje ha tocado su corazón, favor de darnos a saber su respuesta con las siguientes opciones:
1. Sí, hoy escojo confiar en Jesús: Por favor preciona aquí.
2. Yo ya confío en Jesús y me gustaría engrandecer más en mi Fe: Por favor preciona aquí.
3. Voy a seguir buscando: Por favor preciona aquí.